quinta-feira, 20 de outubro de 2016

Leitura saltitante

Umas linhas de um livro de Machado de Assis, umas linhas de outro. Esaú e Jacó, Memorial de Aires, Histórias da meia-noite, História de quinze dias. Neste jogo, ir mergulhando em um universo acolhedor, rico, criativo. Não preciso ler de maneira disciplinada, ainda que isto também seja possível. Posso ler deste ou de outro jeito. Tudo está conectado. Tudo faz parte da unidade. A ida a Carapibus hoje pela manhã. Ver a casa subindo da terra para o céu, os pedreiros alegres, trabalhando. Algo em mim se movimentou. Era como estar começando de novo. É estar começando de novo. Voltar para o céu aberto. Voltar para uma vida menos comprimida. Menos ferrolhos, menos fechaduras. Hoje à tarde dei uma volta. Sentir de mim. Saí como quem se deixa levar para a terra. Foi diferente. Algo já está mudando, para melhor.  

sábado, 15 de outubro de 2016

Dispensando

Uno de esos días en que no tenés obligaciones. Es decir, aquellas que era necesario cumplir, como ser las compras para el desayuno, ya fueron realizadas. 

El paseo matinal por la beira-mar y por algunas calles del barrio, siempre tiene la virtud de alegrarme. Una entrada en la casa de lotería, en busca del número premiado que todavía se sigue escondiendo. 

Saber que cuando no pienso, veo. Esto me sucedió al pasar frente a una casa de ladrillo visto, en la avenida Navegantes. 

Venía pensando sobre el pensamiento, qué es, y cómo muchas veces obstruye y dificulta el contacto con la realidad. En ese momento se hizo silencio adentro mío, y vi la casa. Sentí su presencia.  

segunda-feira, 10 de outubro de 2016

Volver

Lunes otra vez, como dice la canción. Y en estas horas primeras del día, repito el ritual no repetitivo, un ritual del que no me iré a cansar. Escribo algunas líneas, que es una manera de estar en Mendoza. Una manera de volver a Mendoza. Una forma de saber que Mendoza es aquí, es allí, es todas partes. Pongo algunas cosas en la hoja, y me dejo ir, me dejo llevar. Llego hasta donde estás, y te veo. Sé que hemos estado un poco distanciados. Pero hago el movimiento de volver. Estamos siempre volviendo, ya que el sistema constantemente nos va apartando de nosotros mismos, de esto que está aquí, y de la gente con quien nos encontramos. Entonces es necesario hacer un esfuerzo para estar aquí, para ser la persona que soy, la persona que cada uno o cada una es. Y ahora que ya estoy aquí, ¿qué diré? Que me alegra poder estar de nuevo en esto de construir libros. Cada una de estas breves notas, es o puede llegar a ser una página de uno de esos libros que de vez en cuando genero. Lugares donde voy testimoniando el viaje por el laberinto, como dice Anais Nin. Hace unos días, estaba terminando de dar un curso de formación en Terapia Comunitaria en Sinop, Mato Grosso. Volví con una alegría nueva, que ahora comparto. La certeza de que puedo ser yo. Una fuerza nueva. Algo volvió a ser lo que es. Algo vuelve a ser lo que debe ser, cuando uno se sumerge en estas experiencias de convivencia y reflexión, creación de vínculos solidarios, momentos de compartir historias de vida y estrategias de superación.  

quarta-feira, 5 de outubro de 2016

Reuniendo

Leo, escribo, recopilo textos míos de otros tiempos o recientes, y en estos quehaceres, recupero una sensación de unidad. Integración en un tiempo unificado. Ya soy niño, ya joven o adulto. Ya el ocaso en que vivo, este crepúsculo virginal que me ilumina el alma y los días.

Leo distraídamente, o con atención cambiante. Hojeo parágrafos de distintos libros, de Machado de Assis, sobre todo. Y también de José Comblin, la Biblia, el Evangelio.

Me reconozco en estos textos, me reúno. Me refuerzo. Junto mis días y mis horas. Mi ahora se enraíza en el tiempo. Un tiempo unificado.