A veces me ocurre que me olvido de mí mismo. Me olvido de
quien soy. Me pierdo de vista, y creo haber sido víctima de los actos de algunas
personas que en el pasado me causaron dolor y sufrimiento. Me viene una bronca
bárbara. Tanta bajeza. Humillación. Impunidad. Traición. Una bronca bárbara,
che pibe o piba. Pero de pronto veo que no. Veo que supe salir victorioso de
todas esas situaciones del pasado, y aquí estoy. Entero y fortalecido. Entonces
respiro hondo, me veo como tanta gente a
mi alrededor, que también deben haber salido de situaciones dolorosas,
como yo. Estamos todos aquí. Estoy aquí, en medio de todo el mundo. Vivo,
renacido, sano y confiante.
Nenhum comentário:
Postar um comentário